6 cosas que las personas introvertidas odian
La definición del diccionario de una persona introvertida es alguien que “por lo general prefiere las actividades solitarias a interactuar con grandes grupos de personas”. Esto podría ser lo que usted se imagina cuando piensa en una persona introvertida, pero hay más aspectos de estas personas que quizás desconozca. Si bien es cierto que muchos introvertidos se ponen ansiosos en las reuniones sociales, no todas las personas introvertidas son extremadamente tímidas y no todas se quedan en casa leyendo libros cada fin de semana. La introversión es a menudo un rasgo de la personalidad mal entendido. Si conoce a una persona introvertida, la comprensión de sus gustos y disgustos puede ayudarle a crear un vínculo más fuerte con ellos.
Aquí tiene seis cosas que las personas introvertidas odian absolutamente:
1. Las multitudes
Si tiene suerte, puede convencer a una persona introvertida para ir a un concierto o ir a ver una película. Disfrutarán de ello, pero de lo que no podrán disfrutar son de las multitudes. Estar de pie junto a un extraño en un concierto que no entiende el espacio personal es como una pesadilla hecha realidad para una persona introvertida. Será feliz de estar disfrutando de ese momento con usted, pero en secreto desearán que no hubiera nadie más alrededor.
2. Hablar por teléfono
A los introvertidos en realidad no les gusta hablar sin un propósito. Cuando alguien llama sólo para charlar o ver cómo van las cosas, temen contestar la llamada. Aunque si hay un tema urgente que se necesita discutir o una situación de emergencia, no dudan en llamar ellos mismos. Aparte de eso, suelen comunicarse por mensajes con el móvil o por correo electrónico.
3. El ruido
Los introvertidos aprecian realmente el silencio. Disfrutan de ser capaces de escucharse pensar y encuentran la paz cuando el mundo está en silencio. Pero no disfrutan del ruido por el ruido. No entienden a las personas que mantienen la televisión o la radio durante todo el día como ruido de fondo. Les resulta mucho más fácil concentrarse y ser productivos cuando están tranquilos.
4. Reuniones sociales
Ésto es probablemente bastante obvio. Los introvertidos odian las reuniones sociales. Pero no se preocupe, ellos están por lo general muy bien con la familia durante las fiestas de Navidad, porque conocen a todos. Esto se refiere más bien por ejemplo, al momento de estar en contacto con los compañeros de trabajo fuera del trabajo. Estar rodeados de personas que no conocen bien les produce ansiedad. Los introvertidos prefieren pasar el rato con un amigo cercano cara a cara, que asistir a una fiesta de un conocido.
5. Que les digan: “eres demasiado tranquilo”
Esta frase es bastante irritante para una persona introvertida. No hay razón para pensar que son “demasiado tranquilos”. Los introvertidos no sienten la necesidad de decir todo lo que piensan o compartir todas las emociones que sienten. Otras personas son diferentes, lo cual está también bien. Pero decir que una persona introvertida es “demasiado tranquila” sólo porque se comporta de manera diferente nunca es aceptable.
6. Pequeñas charlas
Los introvertidos no ven el punto de la charla. Ellos lo ven como una conversación forzada. Ellos odian totalmente sentirse obligados a hablar con gente que no conocen, sobre todo de cosas como el clima. Los introvertidos tratan activamente de evitar éste tipo de charlas y verse obligados a tener una conversación con alguien al que apenas conocen.